A LA LUZ DE LA TARDE

Cuando muere la tarde toman protagonismo

Las nubes y los pájaros, caminando a la noche

Y va perdiendo luz la tarde moribunda, dando paso

En su ciclo a esa silente oscuridad que nos invita al sueño.

Y mientras las aves se recogen, la sombra de otra tarde,

De otras nubes, de otras aves, vienen a hacerme compañía,

Sabiendo que estoy sola, sabiendo que tu sombra,

Que surge de la nada y en la nada se funde

Nunca va a acompañarme, porque ya de ti no me queda

Ni siquiera un recuerdo de lo que fuiste un día.

Con la tarde que muere, el paso de las nubes

Y el vuelo de los pájaros voy remendando esta soledad.

En paz respiro y doy por bueno que todo lo pasado quede pasado,

Y me bebo esta luz que se me acaba y me deja soñar

Con un pasado que ayer recién era presente, con el hoy presente,

Con mañana aun futuro, con el futuro que siempre es empezar.

Un comienzo sin esperanza no es casi ni un suspiro

Pero nunca se sabe lo que se puede hallar por el camino

Mientras que caminamos. Un paso y después otro,

Todo es seguir buscando lo que has soñado en tu peregrinar.

CONCHA BELMONTE, enero de 2.020