SIEMPRE EL MAR
Sueño con el mar.
Casi siempre mis pasos hasta el mar me llevan
Y a su vista y a sus pies, mi alma se serena.
Cuando tengo una pena se la cuento al mar,
Una dulce alegría la comparto con él.
Y a mis melancolías,
El mar les pone siempre un granito de sal.
Hoy, sentada a su vista y a sus pies,
En oración al Destino le pido este deseo:
Déjame oh Destino, que cuando llegue el día,
Mis cenizas reposen para siempre en su seno.
CONCHA BELMONTE, mayo de 2.018
Comentarios
Publicar un comentario