EN EL BAR DE LA ESQUINA
Sobre un velador sucio del bar de mi barrio
una copa de vino que ni a vino sabe.
Una mirada turbia, rota de mirar al olvido,
una sonrisa amarga que desgarra la boca,
una mano temblona que sujeta la copa.
Una pregunta en los ojos que nadie responde,
una camisa sucia que cubre un pecho hundido,
una desilusión, sin una queja, un no saber por qué
se torció un destino, dejando sin hacer
lo que pudo haber sido un buen proyecto de hombre.
CONCHA BELMONTE
11 de agosto de 2.018
Comentarios
Publicar un comentario