NIEBLA Y TRISTEZA
En esta triste tarde estoy sola,
sola con mi tristeza
que siempre me acompaña
desde que tú te has ido.
Y mi llanto callado
se vuelve niebla, niebla
que empaña la luz que alumbra
mi corazón marchito
y por tu ausencia llora.
Mi tristeza y la tarde
blandamente empapadas de llanto
hacen que poco a poco todo se vuelve niebla.
La puerta a mi interior para tí abierta
y mi luz encendida por si regresas
es sólo una ilusión, no una certeza.
Roto mi corazón cansado de esperar
envuelto en la tristeza, tomo una decisión,
levanto la cabeza con rebeldía
y canto una canción.
Y me digo, tu olvido y mi tristeza
son buen motivo de aprender la lección,
y esta lección por hoy la hago mi alegría.
CONCHA BELMONTE
agosto de 2.023
Comentarios
Publicar un comentario