GUERRA CONTRA LA VIDA
Recuerdo de Amado Nervo
Esta guerra que yo no he provocado,
de antemano me consta que la tengo perdida,
este cuerpo cada vez más pequeño
se compensa con las alas de mi alma
para poder salir por sus viejas ventanas
y mirar desde fuera lo hecho desde dentro,
y no renuncio a nada, de nada me arrepiento,
todo aquello que hice, lo hice en su momento.
Hubo momentos malos, hubo momentos buenos
y momentos gloriosos de amor y poesía;
fui hija y madre, fui amante y amada,
fui hermana querida por todos mis hermanos,
y en los últimos tiempos soy abuela amorosa
de flores verdecidas de ilusiones tempranas,
me siento satisfecha de todo este trabajo
al que he contribuido. Ahora sólo quiero
cerrar todo este tiempo para firmar la paz.
Por eso, imitando al poeta le propongo a la vida:
Nada me debes vida, vida estamos en paz.
CONCHA BELMONTE
agosto de 2.022
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