Me llamo Primavera la más tierna y más dulce

de las cuatro estaciones.

La que regala siempre

lo más bello y florido de la sal de la tierra.

La que pone armonía y belleza

allí donde el invierno puso el frío de sus besos.

Donde al soplo templado de mis aires más tiernos

voy regalando  al mundo el  color y el perfume

De mis mejores flores.

Y acuno entre mis brazos a los amantes y poetas.

Sin mí no sonarían iguales  esos veinte poemas

del amor de Neruda y quizá ni siquiera

Esa canción desesperada

no sería lo mismo en medio del otoño.

Becquer  me debe en parte  que sus hermosas Rimas

salieran al influjo  de mis noches suaves

y Darío, Benedetti, Cortázar, Octavio Paz,

y el Dante, Homero, Shakespeare y Calderón,

Lope de Vega, Góngora, Espronceda,

Él tan desesperado, se consoló en mis brazos.

Y San Juan de la Cruz, junto a Santa Teresa

Alzaron hasta el cielo su amor hacia el Amado.

La dulce Safo, Rosalía de Castro,

Sor Juana Inés, Gabriela y Alfonsina,

Las poetas, más que ellos, se refugian en mí

Porque se sienten solas, exiladas del mundo

 y acunaron sus sueños al calor de mi abrazo.

Por eso en esta noche, con estas tiernas flores

Me presento ante el mundo, para que el mundo sepa

Que nací para darles lo mejor de mí misma.

Lo mejor de sus sueños saldrá de entre mis manos,

y  no quiero que olviden que cuando yo me vaya

el ardor del verano puede quemarlos.

 

CONCHA BELMONTE

       abril de 2.003

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL VIENTO DE LA MENTE

EL DESTINO

OLVIDA TUS TEMORES