ME EQUIVOQUÉ DE SENDA

 


 

 

Soñándote me equivoqué de senda.

Perdí el norte y perdí ese cielo

que andaba buscando con anhelo

para encontrarme sin saber hacer mi ofrenda.

 

He procurado no hacer nada que te ofenda

y equivocada o no, seguir en el deshielo

para sentirme cerca del consuelo

de ofrecerte amorosa esta encomienda.

 

Y encontrada o perdida, tener tu mano

para agarrarme a ella y nunca más perderte,

y caminar juntos el camino soñado.

 

Para vivir y soñar te quiero hermano,

para morir sin ti, sólo la muerte.

Cerrándome a la vida, y todo terminado.

 

 

        CONCHA BELMONTE

            febrero de 2.016

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL VIENTO DE LA MENTE

EL DESTINO

OLVIDA TUS TEMORES