EL MAR Y TÚ

 

 

 

Levanto la mano para tocar tu cara,

eres tan grande que me acobardas,

y mi mano en el aire se queda quieta

por temor de rozarte y desaparezcas,

no sé si estoy soñando o estoy despierta.

Si no eres un sueño vente conmigo,

caminaremos juntos soñando mil caminos,

y yo te juro que para tí voy a volverme bruja

y haré un conjuro que te haga feliz.

Si te quedas conmigo  mi vida será tuya,

para que sepas que creo en ti, te veo tan grande

que sólo el mar y tú podéis ser rivales.

 

Y a la orilla de la mar nos besaremos,

él a mí siempre me besa con sus espumas,

y de tus besos nunca va a sentir celos,

me conoce muy bien y aceptará, estoy segura,

que seas en mi corazón siempre el primero,

yo te lo entrego, y él lo sabe, aun sin premura.

 

     

                CONCHA BELMONTE

                    octubre de 2.024